Salsa para el pollo asado
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Salsa de pollo frito
La cena no puede ser mucho más clásica que el pollo asado, y prepararlo es realmente muy sencillo. Pero, la pregunta que se cierne sobre esta sencilla cena es ¿cómo hacer el mejor pollo asado? ¿Y cómo hacer que sea lo más sencillo posible, para poder disfrutarlo una y otra vez en cualquier ocasión, con muy poco esfuerzo? Pues bien, nuestro pollo asado con salsa de limón y hierbas responde a estas preguntas. Es sencillo, delicioso y es el pollo asado ideal. Fin de la historia.
Muchas recetas sugieren cocinar el pollo en un horno de 350°F a 375°F, y luego aumentar la temperatura al final de la cocción para que la piel quede crujiente. Aunque esto funciona, nosotros preferimos tener el horno a una temperatura caliente al principio para que el pollo no se cocine demasiado y se seque. Esto es lo que queremos que haga en su lugar:
Cuando la temperatura interna alcance los 165° F y los jugos salgan claros, su pollo estará listo. Deje reposar el pollo durante 10 minutos antes de cortarlo para mantener todos esos deliciosos jugos sellados en su interior. Este método da como resultado un pollo perfectamente jugoso por dentro, con una piel deliciosamente crujiente por fuera.
Salsa fácil para el pollo
OTRAS REGLAS Deje siempre reposar el pollo durante al menos 15 minutos antes de trincharlo. De este modo, obtendrá un pollo jugoso que será mucho más fácil de trinchar. Para obtener un pollo más suculento, sácalo de la nevera una hora antes de cocinarlo para que esté a temperatura ambiente. Esta regla se aplica a cualquier carne que se ase. No te preocupes por darle la vuelta o hilvanar el pollo mientras se asa. Sí, esto puede dar buenos resultados, pero es complicado para los principiantes, y además cada vez que se abre el horno se pierde calor.
LA REGLA DE ORO PARA ASAR POLLO… Un pollo de 1,5 kg estará perfectamente asado después de 1 hora y 20 minutos a 190C/ventilador 170C/gas 5. No importa lo que le rellenes, frotes o espolvorees por encima o pongas alrededor, este tiempo nunca cambia. Recuerda esto y siempre podrás asar un pollo.
BARNEY DICE… ¿Te has preguntado alguna vez cómo los cocineros profesionales consiguen platos impresionantes sin ni siquiera consultar una receta? Se trata simplemente de reglas básicas, que se han seguido tan a menudo que se convierten en algo natural, garantizando que el plato funcione siempre. Lo mismo ocurre en casa: una vez que se han aprendido las reglas básicas, cocinar resulta más fácil y uno puede relajarse y empezar a experimentar más, sabiendo que el resultado final siempre será delicioso. Simplemente siga las reglas y no se equivocará.
Pollo asado los domingos
No hay cena más clásica que el pollo asado, y prepararlo es realmente sencillo. Pero, la pregunta que se cierne sobre esta sencilla cena es ¿cómo hacer el mejor pollo asado? ¿Y cómo hacer que sea lo más sencillo posible, para poder disfrutarlo una y otra vez en cualquier ocasión, con muy poco esfuerzo? Pues bien, nuestro pollo asado con salsa de limón y hierbas responde a estas preguntas. Es sencillo, delicioso y es el pollo asado ideal. Fin de la historia.
Muchas recetas sugieren cocinar el pollo en un horno de 350°F a 375°F, y luego aumentar la temperatura al final de la cocción para que la piel quede crujiente. Aunque esto funciona, nosotros preferimos tener el horno a una temperatura caliente al principio para que el pollo no se cocine demasiado y se seque. Esto es lo que queremos que haga en su lugar:
Cuando la temperatura interna alcance los 165° F y los jugos salgan claros, su pollo estará listo. Deje reposar el pollo durante 10 minutos antes de cortarlo para mantener todos esos deliciosos jugos sellados en su interior. Este método da como resultado un pollo perfectamente jugoso por dentro, con una piel deliciosamente crujiente por fuera.
Salsa barbacoa de pollo
La cena no puede ser mucho más clásica que el pollo asado, y prepararlo es realmente muy sencillo. Pero, la pregunta que se cierne sobre esta sencilla cena es ¿cómo hacer el mejor pollo asado? ¿Y cómo hacer que sea lo más sencillo posible, para poder disfrutarlo una y otra vez en cualquier ocasión, con muy poco esfuerzo? Pues bien, nuestro pollo asado con salsa de limón y hierbas responde a estas preguntas. Es sencillo, delicioso y es el pollo asado ideal. Fin de la historia.
Muchas recetas sugieren cocinar el pollo en un horno de 350°F a 375°F, y luego aumentar la temperatura al final de la cocción para que la piel quede crujiente. Aunque esto funciona, nosotros preferimos tener el horno a una temperatura caliente al principio para que el pollo no se cocine demasiado y se seque. Esto es lo que queremos que haga en su lugar:
Cuando la temperatura interna alcance los 165° F y los jugos salgan claros, su pollo estará listo. Deje reposar el pollo durante 10 minutos antes de cortarlo para mantener todos esos deliciosos jugos sellados en su interior. Este método da como resultado un pollo perfectamente jugoso por dentro, con una piel deliciosamente crujiente por fuera.