Ermita del santo madrid

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Suites

La Ermita de San Pelayo y San Isidoro es una iglesia románica en ruinas, originalmente en la ciudad de Ávila, España. Fue construida fuera de las murallas de la ciudad, frente a la Puerta de la Malaventura en el lado sur de las Murallas. En Ávila se conserva un espacio conocido como el Atrio de San Isidro. Tras la desamortización española, fue trasladado a Madrid, donde tuvo diferentes ubicaciones. Sus restos encontraron finalmente acomodo en el Parque del Buen Retiro, en el centro de Madrid[1].

Su primer patronazgo fue al niño mártir cordobés, Pelagio, y así se cita en un documento del año 1250, en el que se dice que la iglesia estaba exenta de impuestos. Además, existe un texto de consagración tallado en una lápida fechada en el año 1270.

Los historiadores que han estudiado esta lápida suponen que podría referirse a una segunda consagración de la iglesia, cuando se cambió la advocación de San Pelagio por la de San Isidro. Después de esto, no han salido a la luz más documentos que informen sobre el desarrollo y evolución del pequeño templo hasta el siglo XIX, gracias al libro de la Cofradía de San Isidro que fue descubierto en la sacristía de la iglesia de San Nicolás de Ávila.

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La ermita de San Isidro está situada en los campos de Carabanchel, tierras que pertenecían a Juan de Vargas, el patrón que contrató a San Isidro como cavador de pozos y peón, junto al manantial que el santo hizo brotar milagrosamente para calmar la sed de su señor y que tiene propiedades curativas, según la tradición popular.

En la actualidad, no existe documentación que certifique la fecha de construcción de la primera ermita, pero sí conocemos los primeros testimonios de su existencia, que datan de 1499, gracias a los libros de visitas eclesiásticas que se conservan en la parroquia de San Andrés.

En 1528, la emperatriz Isabel de Portugal, esposa de Carlos V, mandó construir una nueva capilla junto a la fuente en honor a San Isidro Labrador, después de que el monarca y su hijo, el futuro rey Felipe II, se curaran de sus dolencias tras beber el agua de la misma.

Posteriormente, en 1620, Cristóbal de Urgel mandó construir una pequeña capilla junto al altar mayor de la ermita para ser enterrado con sus familiares, así como el retablo mayor, la sacristía y una serie de mejoras.

Pinturas de francisco de zurbarán en el state hermitage

DescripciónInformaciónLa ermita de San Isidro está situada en los campos de Carabanchel, tierras que pertenecían a Juan de Vargas, el patrón que contrató a San Isidro como cavador de pozos y peón, junto al manantial que el santo hizo brotar milagrosamente para calmar la sed de su señor y que tiene propiedades curativas, según la tradición popular.

En la actualidad, no existe documentación que certifique la fecha de construcción de la primera ermita, pero sí conocemos los primeros testimonios de su existencia, que datan de 1499, gracias a los libros de visitas eclesiásticas que se conservan en la parroquia de San Andrés.

En 1528, la emperatriz Isabel de Portugal, esposa de Carlos V, mandó construir una nueva capilla junto a la fuente en honor a San Isidro Labrador, después de que el monarca y su hijo, el futuro rey Felipe II, se curaran de sus dolencias tras beber el agua de la misma.

Posteriormente, en 1620, Cristóbal de Urgel mandó construir una pequeña capilla junto al altar mayor de la ermita para ser enterrado con sus familiares, así como el retablo mayor, la sacristía y una serie de mejoras.

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